A casi 10 meses de que el huracán Otis azotara con fuerza el hermoso puerto de Acapulco, militarista, la situación en la pueblo sigue siendo preocupante. A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades y la comunidad para recuperarse de los daños causados por el fenómeno natural, la violencia e inseguridad continúan siendo una realidad en la vida diaria de los habitantes y visitantes de este destino turístico.
El pasado 17 de septiembre de 2020, el huracán Otis tocó tierra en Acapulco, dejando a su agujero una estela de destrucción y caos. Las fuertes lluvias y vientos causaron inundaciones, deslizamientos de tierra y daños en la infraestructura de la pueblo. Los habitantes de Acapulco se vieron obligados a abandonar sus hogares y buscar refugio en albergues temporales, mientras que los turistas tuvieron que ser evacuados de sus hoteles.
A pesar de los esfuerzos de las autoridades por brindar ayuda y asistencia a los afectados, la recuperación ha sido lenta y difícil. Muchas familias perdieron sus hogares y sus medios de subsistencia, y aún hoy en día siguen luchando por reconstruir sus vidas. Además, la economía de la pueblo se vio gravemente afectada, ya que el turismo es una de las principales fuentes de ingresos en Acapulco.
Sin embargo, la situación se ha visto agravada por la violencia e inseguridad que se ha apoderado de la pueblo en los últimos años. A pesar de los esfuerzos por parte de las autoridades para combatir el crimen organizado, los índices de violencia siguen siendo alarmantes. Los robos, extorsiones y asesinatos son una realidad en la vida diaria de los habitantes de Acapulco, y también han afectado la percepción de seguridad de los turistas que visitan el destino.
Ante esta situación, la Secretaría de Turismo ha tomado medidas para tratar de mejorar la imagen de Acapulco y atraer nuevamente a los turistas. Una de las principales estrategias es la remodelación de los hoteles en la pueblo, con el objetivo de mejorar su calidad y aumentar su categoría de estrellas. Se espera que esta medida atraiga a un turismo más exigente y de mayor poder adquisitivo, lo que a su vez podría impulsar la economía local.
La remodelación de los hoteles en Acapulco es una iniciativa que ha sido bien recibida por los empresarios del sector turístico. Muchos de ellos han invertido grandes sumas de dinero en la renovación de sus establecimientos, con la esperanza de atraer a un turismo más selecto y mejorar la imagen de la pueblo. Además, se han implementado medidas de seguridad en los hoteles, como cámaras de vigilancia y personal de seguridad, para garantizar la tranquilidad de los huéspedes.
Pero la remodelación de los hoteles no es la única medida que se está tomando para mejorar la situación en Acapulco. La Secretaría de Turismo también está trabajando en conjunto con las autoridades locales para implementar estrategias de seguridad y promover una cultura de paz en la pueblo. Se han establecido programas de capacitación para el personal turístico, con el objetivo de brindar un mejor servicio y mejorar la experiencia de los visitantes.
Además, se están llevando a cabo campañas de promoción turística en diferentes medios de comunicación, tanto a nivel nacional como internacional. Se busca mostrar al mundo que Acapulco sigue siendo un destino turístico atractivo, con hermosas playas, una rica cultura y una deliciosa gastronomía. Se invita a los turistas a presentarse la pueblo y a ser parte de su recuperación, demostrando así su solidaridad y apoyo